- 6 muslitos de pollo
- 3 ó 4 dientes de ajo
- aceite de oliva virgen extra
- 1 tarro de cristal de zanahorias baby
- 1/2 litro de vino blanco
- sal gorda y perejil
En primer lugar quitamos la piel y el exceso de grasa a los muslitos de pollo y los doramos en una olla con un poco de aceite de oliva virgen extra. Ponemos sal gorda y damos unas vueltas.
Agregamos los dientes de ajo cortados en láminas y el perejil picado y damos unas vueltas más pero con cuidado de que no se estropeen o se rompan los muslitos. Cuando veamos que el ajo ya empieza a estar hecho, incorporamos las zanhorias baby y el vino blanco (si tenemos un poco de caldo podemos añadirle también un vasito). Bajamos el fuego, tapamos y dejamos cocer una media hora.
Agregamos los dientes de ajo cortados en láminas y el perejil picado y damos unas vueltas más pero con cuidado de que no se estropeen o se rompan los muslitos. Cuando veamos que el ajo ya empieza a estar hecho, incorporamos las zanhorias baby y el vino blanco (si tenemos un poco de caldo podemos añadirle también un vasito). Bajamos el fuego, tapamos y dejamos cocer una media hora.
Para acompañarlo yo he salteado unas espinacas con piñones y pasas, así de sencillo pero no menos rico.
Y ya está, a comer. Otra forma de cocinar el pollo, la mar de fácil y, además, súper rico, por el gusto que le da el vino blanco y lo jugoso que sale.
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